Desarrollada entre 1945 y 1949, la Revolución China enfrentó a nacionalistas y comunistas, triunfando estos últimos encabezados por Mao-Tse-tung, quien implantó un régimen comunista con base en el campesinado, sin dejar de tener inconvenientes con la URSS. En el año 1934, Mao Tse Tung había emprendido la denominada larga marcha, en donde trasladó a su ejército por gran parte del país expandiendo su ideología y sumando nuevos focos guerrilleros. Luego de una tregua a raíz de la invasión japonesa durante la guerra mundial, el conflicto civil en China se desató.
Una de las mayores aspiraciones de Mao era transformar a China en una potencia mundial, para lo cual implementó una reforma a la que se le denominó 'el gran salto adelante', momento en el cual el Estado comenzó con la expropiación de latifundios y con un proceso industrializador basado en su potencial humano. A partir de los años 70 China se acerca a Occidente, a tal punto que el Presidente de EEUU, Richard Nixon visita el país en 1972. La muerte de Mao en 1976 marca el inicio de un proceso definitivo de occidentalización y apertura, hecha igualmente sobre las bases de un partido comunista único
Por Patricia Alejandra Hernández Valenzuela 2°"A"
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